Que sí. Que ver a la purrela progre perdiendo terreno siempre agrada. Que los degenerados woke, los alarmistas climáticos, los covidiotas, las feministas histéricas y el resto de ralea globalista estén viendo como Trump anula (de momento) sus dogmas, prebendas e imposiciones es algo que devuelve algo de cordura al panorama. Pero no nos engañemos: Trump, como es natural, barre para casa, que para eso lo han elegido. Aquí nos están acostumbrando a que consideremos las elecciones gringas como algo propio. En el imaginario de cierto electorado gregario, se identifica al Partido demócrata con el PSOE y al Republicano con el PP. Como si el Secretario de Estado travelo que puso Biden al frente del Pentágono fuera un trasunto de Marlasca y la Karademala Harris fuera una especie de Yolanda Tucán Díaz pasada de rayos UVA. Viendo el entusiasmo de cierta derecha casposa por el triunfo republicano en USA pudiera parecer que Trump va a devolver a Irene Montero a su puesto de cajera, va a pone...
Bitácora de respaldo del Blog de Teletype LA TRINCHERA DISIDENTE. Textos de J.L. Antonaya.